Mi sangre en palabras.
Ríos de tinta que sueños surcaban,
Muertes, recuerdos, batallas
Y un lugar donde narrarlas

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Donación de sangre

Hoy es 22 de noviembre de 2011. Hoy es otro día más, un día cualquiera. Un día tan bueno como cualquier otro para salvarle la vida a alguien.
Cada día se usan decenas de litros de sangre, plasma y plaquetas en todos los hospitales de España. Anemias, leucemias, intervenciones quirúrgicas y muchas otras enfermedades y técnicas que consumen una de las materias primas más simples y más difíciles de obtener. Su dificultad radica en el ingrediente fundamental, de cinco sílabas: solidaridad.
Se ha intentado obtener en laboratorios y mediante experimentos, pero no ha servido. La única sangre que nos sirve es la propia nuestra, la que nos mantiene a nosotros vivos y la que puede ayudar a otra persona a seguir viviendo. Somos muchos los que ya donamos, incluyéndonos los dos que escribimos para este blog. El problema, sólo podemos donar entre 3 y 4 veces al año (depende de si eres mujer u hombre, respectivamente) sangre y otras tantas plasma.
La donación de plasma es igual que la de sangre, sólo que un poco más larga en el tiempo. No te quitan más sangre. Es igual de segura, e igual de necesaria. Últimamente incluso más.
Una donación de sangre, plasma o plaquetas puede salvar una vida en cualquier momento. Cuando el 11-M miles de personas acudieron a donar sangre. Lo que casi nadie sabe es que las donaciones tienen que pasar unos controles para evitar problemas (infecciones que tenga el donante, por ejemplo) y que los que salvaron tantas vidas fueron los que el 8, 9 o 10 de marzo fueron a donar porque querían ayudar sin saber lo que iba a pasar.
Salvar una vida no cuesta tanto, sólo un poco de tu tiempo. El día de mañana puede salvar a alguien cercano a ti, o a cualquiera que la necesite.

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